¿Verano libre o verano ocupado?

Fuente: Clínica Alemana de Chile

Cuando los pequeños tienen problemas de aprendizaje, a los papás les surge la duda si las vacaciones de verano son para que descansen o para usar ese tiempo sin colegio para reforzar los conceptos adquiridos.

Lo ideal es que las vacaciones sean para desconectarse, pero si nos encontramos frente a un caso de un niño que recientemente está desarrollando habilidades de escritura y realmente se ve una situación de retraso respecto a su nivel de edad se puede pensar en un apoyo en las vacaciones. No hacerlo puede generar que de regreso el niño sienta no tener los conocimientos que ya había adquirido.

Antes de tomar la decisión de realizar un repaso en vacaciones se debe considerar:

  • La edad y el curso del niño
  • El nivel de aprendizaje
  • Trastorno del aprendizaje que tiene y cómo impactan en su entorno
  • Carga académica que recibió en el año

Si el conocimiento es inicial en lectoescritura, se puede seguir reforzando en verano para que el volver a clases no sea un cambio tan brusco.

Si es más grande de edad y necesita un pequeño apoyo se puede hacer focalizando en algunos temas puntuales pero no sobrecargándolos con ejercicios o estudio.

Desde lo lúdico también se puede estimular el aprendizaje y en este caso el niño no siente que es una obligación. Se pueden utilizar libros con letras y números para contar, juegos de memoria, juegos de encastre.

El contacto con la naturaleza hace muy bien.

Es importante que los adultos sigan estando atentos en algunos hábitos por más que se esté de vacaciones:

  • Horario de ir a dormir: podemos ser más flexibles, pero no podemos perder la rutina y que todos los días la ida a dormir sea a las 3 de la mañana.
  • Tiempo en pantalla: debemos mantener límites en este aspecto ya que está demostrado que las pantallas no ayudan con la atención, incluso puede empeorar.

 

Compartir